Como cepillarte los brackets durante la ortodoncia
La ortodoncia es uno de los procesos dentales más complejos a la hora del cepillado ya que no resulta simple, pero al final se trata de algo necesario
Aprender a cepillarte los dientes con brackets puede parecer una hazaña casi imposible al principio, pero si conoces los procedimientos y herramientas adecuadas para hacerlo verás que se trata de un proceso algo tedioso pero sencillo, además es esencial hacerlo correctamente para evitar enfermedades bucales, mal aliento y la acumulación de sarro.
Para lograr que el roce de los brackets sobre las encías se minimice debes utilizar un cepillo dental con cerdas suaves, de esta manera podrás prevenir un posible sangrado o la aparición de lesiones
Existen cepillos especiales para ortodoncia conocidos como interdental y están diseñados especialmente para que logres una mejor y fácil limpieza. Con ellos podrás limpiar adecuadamente los espacios interdentales, evitando la acumulación de placa que origina bacterias por los restos de comida atascados entre los dientes y los brackets.
Para aplicar la crema dental, es importante que humedezcas el cepillo, de esta forma vas a obtener una limpieza más eficaz en la ortodoncia, busca siempre una crema que contenga flúor para que la sensibilidad disminuya.
Si estás bajo el tratamiento de ortodoncia es importante que utilices al menos una vez al día hilo dental. Aunque puede ser una tarea un tanto molesta pasar el hilo entre los dientes, este impedirá la acumulación de placa y así evitaras infecciones bucodentales.
Si el hilo y el cepillo dental no eliminan en su totalidad los restos de comida y placa bacteriana acumulada en tus dientes y brackets, el enjuague bucal es el complemento perfecto. En personas con ortodoncia el enjuague ayuda a reducir la hinchazón de encías y mejillas, además de prevenir el desarrollo de gingivitis.
Al utilizar retenedores removibles o aparatos de ortodoncia, es importante que los limpies a diario. Haz que sean parte de tu rutina diaria, límpialos antes de irte a la cama. No utilices agua caliente ya que existe la probabilidad de deformarlos y asegúrate de seguir al pie de la letra las instrucciones de tu dentista.
Existen ciertos hábitos que no se deben practicar cuando se tiene ortodoncia, pueden resultar peligrosos, entorpecen el trabajo de los aparatos e incluso pueden llegar a dañarlos, te recomendamos que evites hacer lo siguiente:
Asistir a controles mensuales con el ortodoncista y continuar con las limpiezas dentales por lo menos cada 6 meses, será parte de la rutina, al verte en el espejo no solo debes comprobar que tus dientes estén limpios también hay que revisar el funcionamiento de los soportes y alambres.